Las púas del erizo
Soy un erizo pero, lo que son las cosas, la naturaleza me puso las púas hacia adentro. Hacia afuera, en cambio, mi piel es bien fina, frágil, cualquier soplo de viento la rasga, una capa insignificante que no merece ni…
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Soy un erizo pero, lo que son las cosas, la naturaleza me puso las púas hacia adentro. Hacia afuera, en cambio, mi piel es bien fina, frágil, cualquier soplo de viento la rasga, una capa insignificante que no merece ni…
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Te prometí un poema, pero no cualquier poema, tu piel una letra arriba, una letra arriba, una letra arriba pi e l mu s los arriba, letra a letra, vello a vello, temblor a temblor un poema que es tu…
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Escribí en un papel el nombre de mis esperanzas, lo guardé en el sobre y lo puse dentro de una caja. No sé si esa caja quedó enterrada o en el desván, pero en el olvido quedaron el nombre allí…
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Quisiera que estas palabras mías fueran bencina, cerilla tu aliento que les pone voz; pero la realidad es un enano amarillo, vestido con escamas de peces de colores, y libera arroyos bajo nuestros pies, desde las alcantarillas, toda una vida…
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Salve vagina, mater misericordia, no hay quien no desee por una u otra razón volver a tu interior desde el instante en que nos expulsas. Vacíos fuera de ti, sin salvación sin pecado, templo, iglesia, asamblea de la única religión…
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Eres un elefante en busca de su cementerio. Vayamos despacio, recorramos hacia atrás el camino, paso a paso, como una partida de ajedrez que se repite en la memoria. ¿Dónde está el cementerio? Repites uno a uno los movimientos pero…
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Ha llovido de nuevo en tu niñez y todavía no has arreglado las goteras. Las canicas o las tabas, elige qué perder de vista, no has hecho tú las reglas del juego. Aunque se empeñe el cielo en llorar el…
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